jueves, 6 de septiembre de 2007

la falta

Mirá que todo este tiempo lo tuve acá y nada ¿eh? Te digo, ni sabía que lo tenía. Pero tenía que venir la otra a decirme con tono teen: "Ay me prestás este libro?" para que yo empezara a sentir la ferviente necesidad de tenerlo. Qué se yo si lo iba a leer, no me vengas con esas preguntas. Te estoy diciendo que hace años que lo tengo acá archivado y que recién ahora, cuando la otra me lo pide, recién ahí lo quiero tener enfrente mío. Sí, ya sé que siempre me pasa lo mismo, pero bueno te lo quería contar. Si te molesta que te lo cuente no me escuches y listo, lo dejamos aca. No, no estoy yendo a la psicóloga, ¿por? Después me decís que yo salgo con cosas agresivas, ¿Qué es esa pregunta? ¿Pensás que debería volver? Decímelo, no tengo problema.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

para mi que era su libro favorito.

Mariano Duna dijo...

No hay que juzgar los libros por su cubierta. Sí, a lo sumo, por su contratapa. O por su olor. Sí, el olor no está mal.

La otra parte de mí dijo...

es que cuando "lo"tenemos no lo valoramos,es más de lo mismo...pero al ser objeto de deseo del otro...ahí recién nos damos cuenta de lo que tenemos...y capaz aún estamos a tiempo de seguirlo teniendo...a veces ya se fue para siempre y ahí vienen los arrepentimientos....

LA CARICATURA EXISTENCIALISTA dijo...

con mis libros me pasa lo mismo, muchas veces!

saludos de Tito, la Caricatura Existencialista!

Alan Murray dijo...

Tu estilo me hace recordar a una amiga.

Me gusto moderadamente, pero eso ya es algo, sino mucho.

Alan Murray